La Agenda Urbana para la Unión Europea (UE) se plantea desde una perspectiva claramente operativa, y busca la implicación de las instituciones europeas en una materia en la que los Tratados comunitarios no les reconocen competencias específicas:
- A nivel normativo. La agenda urbana de la UE pretende ayudar a los interlocutores pertinentes a aplicar las políticas, las leyes y los instrumentos de manera más eficaz y coherente.
- A nivel de financiación. La agenda urbana no genera financiación adicional, sino que, basándose en la experiencia, quiere mejorar la calidad de las fuentes de financiación y facilitar el acceso de los gobiernos municipales a esos fondos.
- A nivel de intercambio de experiencias. La agenda urbana de la UE ayudará a crear una base de conocimientos sobre política urbana y fomentará el intercambio de buenas prácticas.
El urbanismo es una competencia de los Estados miembros, de modo que esta Agenda contribuye a generar un marco de trabajo conjunto entre las instituciones de la UE, los Estados miembros, las regiones, las ciudades y otros actores interesados (URBACT, BEI, Eurocities, etc.), sobre una base de igualdad, para mejorar las ciudades, los municipios urbanos y los suburbios.
Para esta Agenda los objetivos temáticos más relevantes para las ciudades son:
- Empleo y competencias en la economía local.
- Pobreza urbana (regeneración de barrios).
- Vivienda.
- Inclusión de migrantes y refugiados.
- Uso sostenible del suelo y soluciones basadas en la naturaleza.
- Economía circular.
- Adaptación al cambio climático.
- Transición energética.
- Movilidad urbana.
- Calidad del aire.
- Transición digital.
- Contratación pública innovadora y responsable.
- Seguridad
- Patrimonio cultural.