Del 7 de febrero al 22 de marzo
Sala de exposiciones del Centro Municipal de las Artes.
He caminado los caminos del arte por Alicante desde el 2004 cuando me residencié en esta ciudad, para cumplir un sueño. Nací en Venezuela y mi profesión fue la ciencia, trabajé en la Facultad de Medicina de la Universidad de los Andes en la Unidad de Genética Médica, en el Laboratorio de Citogenética Médica y me fui formando en lo que me gustaba, el arte. Y con el tiempo he aprendido que trabajar en el arte es como trabajar en un laboratorio, donde se requiere paciencia, silencio y constancia. Allá en mis ratos libres, me dediqué al aprendizaje del arte de la acuarela, con un gran maestro Pedro Palamary, profesor de la Escuela de Arte. Y aquí tuve la suerte de tener dos grandes maestros. Fernando Chapín de quien aprendí la locura de atreverse, en la técnica del grabado. Y Ramón Cortes la paciencia en el arte de la cerámica. Siempre los nombro pues para mí es muy importante valorar a quienes nos abren caminos.
Está claro que cuando tienes decidido lo que quieres, todo de alguna manera se va acomodando, para que las cosas sucedan. En esta obra que presento la palabra es de vital importancia, por eso el título de la exposición lo he definido como un itinerario de lo que más amo, los libros de artista. “Paisajes interiores y exteriores. El espíritu del libro de artista” Imaginar y sentir es un ejercicio muy importante en lo que creo, sin ese viaje interior que constituye el proceso creativo, lo que hacemos no podría comunicar ni transmitir. Luego está la técnica que la considero como una receta, todo eso se puede aprender a través de ella, el trazo, la textura y el color, el movimiento, las superposiciones, el dibujo…en fin. Generalmente voy a los lugares con los cuales me identifico, la naturaleza es un refugio de paz y silencio que valoro mucho, me inspira y me transmite ideas, incluso ciertas cosas, personas y circunstancias se convierten en mí mirada para crear o transformar. He ido construyendo quizá de manera consciente o inconscientemente una simbiosis entre mi profesión y mi arte pictórico. Si tomamos en cuenta que el “espíritu” es una palabra del latín “spiritus”, que significa soplo, aliento, alma, energía, valor. El resultado en muchos casos ha sido ese espíritu que camina, desciende y desanda para crear mis libros de artista.
Ellos constituyen el alma, el interior de la que está hecha mi obra. A través de ellos intento abordar las emociones y sentimientos al hilo de la palabra. Trabajo por series pues casi siempre una palabra es la que me produce esa chispa que genera en mí la idea, es el caso por ejemplo de algunas de las piezas que presento en esta exposición… Somos Contenedores es una serie que tiene para mí el efecto de dar y recibir, vaciar para llenar de nuevo. En realidad mientras vivimos, leemos, trabajamos somos contenedores de reflexiones, pensamientos, circunstancias que aprendemos y transformamos. Si tengo que acertar en dos palabras, mi tiempo dedicado al arte, lo podría resumir en tiempos fértiles, en todos los sentidos. Existe la magia y las contradicciones en la vida y en el trabajo del arte. Entre la dureza de una plancha de grabado para dejar una huella, la fluidez y el movimiento de un pigmento para que impregne un soporte y transmitir la ternura y la emoción de un instante para que se convierta en una obra, es allí donde está todo nuestro paisaje interior, que es el proceso creativo. Les invito a visitar esta exposición con mucho cariño que la dedico a mis padres, a mi hija y a la ciudad de Alicante que me ha dado tanto. Decía F. Nietzsche. “Ver la ciencia bajo la óptica del artista, y el arte bajo la óptica de la vida”.
Mirtya Huizzi