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La Federación de Asociaciones Gitanas de la C.V. y los Ayuntamientos de las dos ciudades organizan actos en recuerdo de La Prisión general de gitanos de 1749
Alicante. Martes 18 de julio de 2017.
Los Ayuntamientos de Denia y de Alicante colaboran en los actos de homenaje con los que la Federación de Asociaciones Gitanas de la Comunidad Valencianase van a recordar a las mujeres gitanas víctimas de la Gran redada, que tuvo lugar en 1749.
El jueves 20 de julio, en el castillo de Denia, van a tener lugar las primeras honras, con el siguiente horario: a las 19 horas, visita guiada por la fortaleza (Desde la entrada al recinto). A las 20 horas, conferencia "Denia y la mujer gitana en la historia de España", a cargo del doctor en Historia Manuel Martínez. En la sala del Castell.
El sábado 29 de julio, en Alicante, en el castillo de Santa Bárbara, tendrá lugar la conmemoración en recuerdo de aquellos sucesos. Desde las 11,30 horas y con participación del concejal de Cultura, Daniel Simón, entre otros represententes públicos y sociales.
Persecución
La Gran redada, también conocida como Prisión general de gitanos, según recuerda Nicolás Jimenez, presidente de FAGA (Federación Autonómica de Asociaciones Gitanas de la Comunidad Valenciana), fue una persecución autorizada por el rey Fernando VI de España, y organizada en secreto por el Marqués de la Ensenada y el Gobernador del Consejo de Castilla, Don Gaspar Vázquez de Tablada, que también era obispo de Oviedo. La redada se inició de manera sincronizada en todo el territorio español el miércoles 30 de julio de 1749 con el objetivo declarado de arrestar y, finalmente, «extinguir», a todos los gitanos y gitanas del Reino de España.
La operación dio comienzo a las doce de la noche, momento en que se prendió y sacó de sus hogares a todos los gitanos y gitanas para separarlos a continuación por sexos. Entre 9.000 y 12.000 personas de todas las edades fueron apresadas aquella noche. 16 años después, casi 4000 seguían presas cuando Carlos III les concedió su indulto en 1765.
Los gitanos y gitanas capturados en el Reino de Valencia (y algunos procedentes de las provincias colindantes) recibieron diferente tratamiento según su género y edad: los hombres y niños mayores de 7 años fueron enviados al castillo de Santa Bárbara de Alicante; mientras que las mujeres, niñas y niños menores de 7 años fueron encarceladas en el castillo de Denia. De ambos lugares fueron enviados a su destino final: Los hombres y niños mayores de 7 años a trabajar al Arsenal de Cartagena construyendo barcos y las mujeres, las niñas y los niños menores de 7 años a las Casas de Misericordia a realizar trabajos forzados de lavandería y costura.
